Comunista malgrat ser milionari o milionari malgrat ser comunista, el seu carnet va ser un regal de Pasionaria i Carrillo; el seu pare va ser un dels fundadors del Partit Comunista d'Espanya i ell el va finançar durant 14 anys, a la clandestinitat. Desconegut per la majoria de la gent (servidor inclòs) Teodulfo Lagunero té nom i cognom de personatge de Roberto Bolaño; encaixaria als Detectives Salvatges al costat de Cesárea Tinajero, i és que la vida d'aquest milionari és novel·lesca, barrocament novel·lesca.
"Sus afectos le llamaban Teo o Fufo. Sus simpatizantes, el Mecenas Zurdo. Sus detractores, El Oro de Moscú. Teodulfo Lagunero (Valladolid, 1927) ha fallecido tras una vida épica; un rojo atípico, le llamó Antonio Lucas, un Onnasis de secano. Comunista a pesar de millonario o millonario a pesar de comunista, su carnet fue un regalo de Pasionaria y de Santiago Carrillo y lleva sus firmas; su padre fue uno de los fundadores del Partido Comunista de España y él lo financió durante 14 años, en la clandestinidad. También fue el chófer que se jugaba la vida al traer a España a Santiago Carrillo, disfrazado con una peluca que él apañó en el taller de su amigo Pablo Picasso, en Cannes, con su célebre barbero malagueño, Eugenio Arias.
Todo eso ocurría a caballo entre 1976, el año que murió con la reforma política de Adolfo Suárez y amaneció definitivamente en primavera cuando el Sábado Santo Rojo fue legalizado el Partido Comunista de España, en vísperas de las primeras elecciones democráticas. Así que tenía mucho más que interés empresarial al producir la película “Siete días de enero”, de Juan Antonio Bardem, que narraba justamente aquella crucial hora de España, pero por la que terminó sintiéndose estafado económica y moralmente.
“Teodulfo Lagunero fue un personaje clave en el proceso de restauración de las libertades que ahora conocemos como Transición Democrática. Sin la legalización del PCE, la Transición no habría sido posible. Sin Teodulfo Lagunero, la legalización del PCE habría sido mucho más difícil, mucho más compleja y traumática de lo que fue. Cualquier crónica honesta y objetiva de aquel proceso, cuya versión oficial sigue insistiendo –aunque cada vez, por fortuna, con menos fuelle– en atribuir todos los méritos a no más de dos o tres protagonistas estelares, tendrá que reconocer forzosamente en el futuro la decisiva responsabilidad de personas como Teo en aquel viaje colectivo, que resumió décadas de lucha y de sacrificio constante de muchos miles de demócratas españoles”. Así describía Almudena Grandes a propósito de sus “Memorias”, uno de sus dos libros, “la extraordinaria vida de un hombre extraordinario”.
El otro, “Mi vida entre poetas”, también es de corte biográfico, a partir de vivencias con sus amigos Pablo Neruda y Antonio Gala, a quien ayudó a redactar los estatutos de la Fundación que lleva su nombre en Córdoba y que este miércoles ha hecho pública una nota de pésame, dirigida sobre todo a Rocío Rodríguez, la viuda de Teo, con quien compartió la friolera de medio siglo de vida y a cuyo nombre puso el Mercedes Benz, gris y de gama alta para distraer sospechas policiales, que le sirvió para camuflar en 17 ocasiones los viajes secretos de Carrillo a España.
También frecuentó la Roma de Rafael Alberti y a Marcos Ana en su destierro parisino. Lo mismo conversaba con Dolores Ibarruri “Pasionaria”, en Rusia, que denostaba que los revolucionarios de la URSS se hubieran convertido en empleados del Partido, mientras sus camaradas españoles seguían jugándose la libertad y la vida.
Claro que llegó a ser catedrático de Derecho mercantil, empresario y abogado, de convicciones comunistas y con una clara querencia por el periodismo: financió “La calle”, el semanario donde se refugió buena parte de la redacción de “Triunfo” cuando se fue a pique la veterana revista antifranquista y fracasó quince años atrás cuando quiso sacar a los quioscos un diario de izquierdas, “La voz de la Calle”, aunque terminara como el rosario de la aurora, dejando en la estacada a su plantilla y a todo el trabajo, el dinero y la ilusión que él mismo puso en tal empeño.
Esa fue una de las principales manchas en su expediente cívico. La otra, algunos negocios inmobiliarios, como los campos de golf que prosperaron en terrenos de su propiedad en la provincia de Málaga, donde, en Fuengirola, habitó un célebre dúplex de mil metros cuadrados, entre meninas interpretadas por el equipo Crónica y unas formidables vistas al Mediterráneo.
Por lo demás, se extiende un apasionante largometraje en modo de biopic: el bombardeo durante la guerra de su casa familiar en el barrio valenciano de Ruzafa, condenado a muerte como su hermano, su primera academia, su puesto de consejero en un banco, su colaboración con la Junta Democrática, que se creó en su caserón de Cannes, su apoyo al Centro de Información y Solidaridad al que se vinculó la viuda de Julián Grimau. Teodulfo Lagunero fue una suerte de pimpinela escarlata, un topo en la dictadura: fue amigo de Miguel Ángel Asturias –que llegó a regalarle su medalla del Nobel– y detractor de Camilo José Cela –“era un delator y un censor”–, le buscó al Comité Central del PCE un local de 800 metros cuadrados en pleno barrio de Salamanca…
También era capaz de compaginar mesa y mantel en el Maxim's parisino con una pancarta en la manifestación del Primero de Mayo, rodeado de exiliados españoles o de su propia hija, que ya había sufrido una tensa detención en Madrid. Ejerció como abogado defensor del fascias León Degrelle. Hay más: sus 30.000 libros, sus escapadas al Caribe, el pago del viaje a Rafael Alberti y de María Teresa León desde Roma a Madrid. Incluso un geriátrico de Asturias lleva su nombre.
El origen de su fortuna tuvo que ver con los negocios inmobiliarios, como la urbanización de 300 chalets de lujo que construyó en la Costa Azul francesa, todo un pelotazo. A comienzos de los 60 fundó una sociedad para comercializar un proyecto residencial llamado el Encinar del Alberche, en Madrid: “Cinco minutos para comprar y cien meses para pagar”, era su lema. Incluso Manuel Fraga le premió por ello. Pero eso fue mucho antes de lo de la peluca. - eldiario.es"
Sabía un poco de este señor, muy poco, algo porque soy seguidor de Cuadernos Arias, que edita Jaume Maymó en honor al peluquero de Picasso y siempre hay referencias de personajes que voltearon la figura del artista.
ResponEliminaEn cuanto a Cela, hay una cosa esgarifosa en la biografía de Dionisio Ridruejo, contada con pelos y señales pero sin señala al Nobel directamente, entre lineas se sabe quien es , eso si, . Resulta que Cela con otros cuantos encuentran a tres "rojos" en una retirada de ellos. Por lo visto se habían quedado rezagados. A dos los matan de un tiro en la nuca, al tercero que se niega a arrodillarse y que dice que antes muere "como un toro", le hieren en la rodilla y lo rejonea Cela.
Esto se sabe porque los otros compañeros de Cela lo explican como un hecho anecdótico, y se sabe porque Ridruejo, al hablar de Cela lo hace con asco.
Si puedes hazte con el libro en la biblio "Casi unas memorias"
Salut
Otra gorda de Cela es el garrote vil que tenía en su museo de Iria Flavia, el mismo que acabó con la vida de Puig Antich.
ResponEliminaHay que ser un verdadero HdP para tener ese instrumento con esa historia en tu museo particular.
És que Cela era molt HdP. Quan li varen donar el Nobel, recordo que el pare va dir d'ell:Un barrut amb bons amics. El pare consideraba que Delibes se'l mereixia molt més que Cela..
EliminaLo del rejoneo de Cela ho habia llegit en algún lloc fa temps, i alguna altra barbaritat més del Premi Nobel. No recordo on.
ResponEliminaSalut.
Has vist l'avioneta elèctrica de l'Aeroport de Sabadell a Collonades?. La vaig veure tornant amb la bici de Cerdanyola.
Si, si que la he vist...No sé molt bé com funciona, em baixaré els datos per internet..és el futur fet present
ResponEliminaHe intentado ver las características técnicas del fabricante, y me ha sido imposible, pero la veo muy liviana, de cabina abierta, me da cierta sensación de inestabilidad. Todo dependerá de las baterías. Si logran cabina cerrada, asientos para cuatro y maletero y que llegue hasta Palma de Mallorca tiene éxito asegurado, habrán muchos clientes.
ResponEliminahttps://www.youtube.com/watch?v=WkF5dWLh_X0
La volen per fer pràctiques, i estan mirant que pugui volar durant una hora,
ResponEliminaHe trucat al Carles, el pilot de SBLL. Es eslovaca, de la casa Valis Md Pipistrel. Vuela sólo 50 minutos , dos personas y vale....160.000 dineuros....muy cara, ahora eso si, te ahorras bujia, revisión cada salida de las burbujas de agua en el keroseno, puestas a punto continuas...el mantenimiento es más económico.
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