És tracte de ser o no ser, aquesta és la qüestió, com deia Hamlet. I no és exactament una qüestió de noms. Sóc partidari d'una utopía política sense banderes, sense himnes i sense visques: partidari d'una política sense ingredients irracionals. Momentàniament, les quatre barres, allà on siguin proferides, seràn una manifestació d'ira històrica i actual. O una alegria fantasiosa i històrica de futur. I és que després de tants mesos seguits de sembrar vents, no fóra gens improbable collir tempestats.
JOAN FUSTER
Me impresiona el escrito de Fuster, por visionario, y por visionario siempre me acojonó El Bosco...Planta sótano del Museo del Prado...imprescindible...
ResponEliminaAqui lo que hace falta una solución mágica, porque humana no puede ser, si existiese el Estado Ideal eso haría que el concepto Estado no existiese y si el Estado no existiese, quizás trabajaríamos menos y disfrutariamos mas sirviendo a nuestros vecinos no por aquello de yo te doy y luego me corresponde recibir, que es como un Estado pero en diminuto, si no por el gusto de hacerlo. Lo dicho, no es humano...
ResponEliminaasi és, pero parece que no sabemos como hacerlo Daniel, mientras, esta lacra de los políticos juegan a sus cositas con sus banderitas y sus tonterias de psicopatas, que es lo que son.
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