LA PROPAGANDA DE MASSES


Una barreja de credulitat i de cinisme era característica destacada de la mentalitat del populatxo abans de convertir-se en fenomen quotidià de les masses. En un món sempre canviant i incomprensible, les masses van aconseguir un punt en el qual, al mateix temps, creien en tot i no creien en res. Pensaven que tot era possible i que res era cert. En si mateixa, la barreja resultava prou notable perquè significava el final de la il·lusió que la credulitat fos una debilitat d'ànimes primitives que res sospitaven, i el cinisme, el vici de ments superiors i refinades.
La propaganda de masses va descobrir que la seva audiència estava disposada al mateix temps a creure el pitjor, per absurd que fos, i que no es resistia especialment a ser enganyada, ja que, d'altra banda, sostenia que qualsevol declaració era una mentida. Els caps totalitaris de masses van basar la seva propaganda a la correcta suposició psicològica que, sota aquestes condicions, un podia fer un dia creure a la gent les més fantàstiques declaracions i confiar que, si l'endemà rebia la prova irrefutable de la seva falsedat, aquesta mateixa gent es refugiaria en el cinisme. En lloc d'eliminar als líders que l'havien mentit, asseguraria que sempre havia cregut que tal declaració era una mentida, i admiraria als líders per la seva superior habilitat tàctica.

Hannah Arendt - "Los orígenes del totalitarismo" (1951) 

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4 Comentaris

  1. De entrada deberíamos significar qué es masa. Podemos ir a Ortega (La rebelión de las masas), o a Onetti (Masa y poder).

    Convergen los dos en varios postulados, y aquí si que esto es interesante:
    Masa es lo que no actua por si misma.
    La masa es mediocridad sin conciencia histórica.
    La masa arrolla lo diferente.
    La masa no divide clases sociales, sino clases de hombres (Ej. los seguidores de un equipo de futbol).
    La masa no tiene cálculos de futuro porque siempre le arremete la urgencia del presente.
    A las masas no les preocupa más que su bienestar.
    Cuando la masa actua por si misma, lo hace sólo de una manera, porque no tiene otra, lincha. A eso se llama "acción directa", o sea, no pensar por uno mismo.
    En la masa no hay protagonistas, sólo coro.

    Con estos apartados podemos discernir lo escrito por H. A., pero ojo, no olvidemos que ella siempre postuló lo de la obediencia debida, y no culpaba a la masa por ignorante, sino a la jerarquía por dar las órdenes (caso Eichmann), salvaguardando a la masa que obedecía las mismas.

    Hoy, salvando las distancias y sin hacer comparaciones con este bárbaro, nos encontramos con un caso casero (perdón por la reiteración); resulta que tenemos a un confeso padre de la patria que ha estafado, robado, expoliado, mentido, jurado en falso y exportado el dinero a paraísos fiscales. (Banca Catalana, Pretoria, Gran Tibidabo, El Observador, etc...) ; bien, pues la masa que desde un primer momento comenzó a seguir al lider confeso hijo del Florenci, se niega a aceptarlo, y, si lo acepta, te dice que cae simpático, que ha sido un buen político, que en otras partes de España se roba igual y que este, al menos "es de casa".
    Esta es una de las maneras en que suele comportarse la masa.

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    1. Per ací va la cosa, per l'acceptació i fins i tot justificació de la mentida, del robatori que la massa acepta i justifica; el cas de Pujol és un exemple claríssim.

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  2. El verdadero objetivo de los regímenes totalitarios, además de gobernar, es someter cada aspecto de la vida de los individuos, eliminando así su libertad y hasta sus derechos más elementales. ¿Qué lleva a millones de votantes en la actualidad a depositar su confianza en aquellos? ¿Qué lleva a una ciudadanía a aceptar sobre sí misma un sistema tan perverso? ¿A qué obedece su auge? Hay algo enfermo en todo esto.

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  3. ¿hay algun régimen que no sea totalitario en el planeta?.

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