MÚSCULS DE CEBA DAURADA


Tenim uns científics que ensenyen i dissenyen uns robots que s'assemblen cada vegada més als éssers humans, no només per la seva intel·ligència provada sinó ara també per les seves habilitats d'expressar i rebre emocions, mentre que als humans els hàbits consumistes ens estan fent cada vegada més similars a aquests robots, encara que estiguem perdent la capacitat d'expressar i rebre aquestes emocions que ells comencen a tenir. La diferència entre ells i nosaltres és cada vegada menor, de manera que a mitjà termini, ja estaran preparats per a substituir-nos en la vita quotidiana, encara que siguin robots amb músculs de ceba daurada.

Publica un comentari a l'entrada

7 Comentaris

  1. Ya te lo comenté. En Ética Aplicada, rama Bioética, se diferencia lo que es un robot (máquina programada para efectuar una tarea concreta como por ejemplo pintar coches en cadena) de lo que es un humanoide, o sea, máquina programada para tomar decisiones que se auto-programa según la circunstancia de la decisión que haya de tomar.
    Entre la una y la otra máquina hay un abismo.
    Las máquinas de metro sin conductor o los coches de ese mismo estilo están en el grado de humanoides, dado que toman decisiones en fracción de milésima de segundo para causar el menos mal posible en caso de haber una incidencia.
    Por ejemplo, una persona cae a la vía desde un anden. Entra el metro.
    Dependiendo de la cantidad de personas de pie dentro de los vagones, de la velocidad que lleve en ese momento, de la distancia del tren al objeto, de que si el objeto tiene forma humana ¡o no¡...el metro frenará bruscamente o no frenará, o frenará con mayor presión en las ruedas pero sin hacerlo en seco. En todo caso, la decisión del acto la tomará el humanoide.

    No me vale que se diga que ya está programado para eso, porque es lógico, está programado para no matar o hacer el menor daño posible, pero la decisión, insisto la toma la máquina.

    Y ahora que le expliquen a la familia de la persona que se ha caído del andén del porqué no paró de golpe el metro cuando vio una persona en la vía.

    Salut

    ResponElimina
  2. poco a poco, van millorant els robots en la mesura que nosaltres empitjorem.

    ResponElimina
  3. Tampoco no hay que exagerar,las maquinas se pueden programar desde la antigüedad,con artilugios antes
    mecánicos(molinos de viento,hidráulicos) y ahora electrónicos,pero no dejan de ser programas,más o menos
    perfectos,manipulables siempre por una persona,que en un momento dado,puede pasar a la opción manual.El problema es que nos estamos acostumbrando a la comodidad,en mi caso con el "peazo" televisor que tengo,
    me he acostumbrado a cambiar de programas gritándole.Lo malo es que a veces le digo ¡cinco! y me contesta
    que no me entiende,al final me he dado cuenta que me sale ¡sinco!.No lo programó un andaluz,"lexe".

    ResponElimina
  4. mi hija lo tiene en el mòvil, le habla y la entiende, y eso que tiene asiento catalán.

    ResponElimina
  5. No jodaís ¡¡¡
    ¿ cambia el canal al grito de voz ?

    ResponElimina
    Respostes
    1. Y SOBRE TOT DIR: és d'ells, o un copet a l'estri.

      Elimina
    2. si, Nuri, posa tv2. Perdó, si llegeix aixó la dona ja he begut oli.

      Elimina