La paciència i resignació que tenim els ciutadans és admirable. Fa més d’un any que estem amb llibertats bàsiques limitades, com les de moviment o de reunió. Des de fa mesos estem en toc de queda mentre avança la crisi econòmica i social pels efectes de la pandèmia. Tot això ho assumim amb la confiança que ens ajudarà a sortir d’aquest atzucac, però en l’ambient es percep esgotament, impaciència i malestar creixent.
Les raons que expliquen aquest sentiment d’enuig emergent són varies. Veiem que totes aquestes mesures restrictives no aturen el virus perquè la sanitat continua molt estressada, els contagis es mantenen alts i l’amenaça d’una quarta onada la tenim a tocar. A aquesta sensació d’inutilitat se li sumen els dubtes que generen actituds com la de la comunitat de Madrid, on s’ha optat per mantenir oberta bona part de l’activitat assumint el cost pandèmic. D'acord que el nombre de morts comparativament a Madrid és molt més alt que el de Catalunya, però aixó no sembla importar massa als madrilenys, que pensen votar massivament Díaz Ayuso en les properes eleccions, si fem cas a les enquestes.
Una altra raó principal que explicaria la contenció col·lectiva és l’esperança de l’arribada de les vacunes. El procés avança molt lentament i ple d’ entrebancs que alimenten les desconfiances. La UE ha sortit molt tocada per la gestió de la vacunació i augmenta la sensació de fracàs. Fins i tot Alemanya, líder europeista, busca vacunes fora de l’estratègia comuna perquè detecta que els alemanys han arribat al límit de la tolerància. Tot aixó genera desànim entre la ciutadania, un desànim que anirà en augment.
Deia l'altre dia Bernat Dedéu que ell es rendia, que l'Estat havia vençut, que quan li diguessin es poseria la vacuna que li pertoqués, i santes pasques. Admiro el grau de paciència de molts ciutadans que pensen com ell. En altres circumstàncies i per motius molt menys rellevants, hem vist sonores protestes i aldarulls. De moment, la processó va per dins però la inquietud dels portants pot sortir a la llum en qualsevol moment. La paciencia té un límit.
Esto pasará factura.
ResponEliminaMis sobrinas están exhaustas, y por lo que dicen ya no pueden más.
Falta personal, mucho personal, y lo saben.
Salut
Navarra tiene 294 casos por cada 100.000 habitantes, teniendo practicamente cerrado todo y con restricciones más duras, Madrid tiene 266 con todo abierto, ¿quién tiene razón?
ResponEliminaCastilla y Leon 135 y ahora tenemos abierto y con aforo limitado
El Pais Vasco con restricciones tiene 246.
Por poner unos ejemplos.
Ayer estuve haciendo compra en Mercadona, Hipercor, en la frutería de un amigo y en la carnicería de otro. Después me tomé un par de cervezas, y puedo asegurar y aseguro, que en los únicos sitios que de verdad se respetaba la distancia y el aforo era la frutería, la carnicería y el bar. En los supermercados la gente coge cosas, las vuelve a dejar y esas cosas, la verdad es que me pone enfermo y más en la situación actual, pero luego la culpa es de los bares, digo bares, no discotecas o similares. En la carnicería y en la frutería, los clientes no tocamos los productos, en las grandes superficies, hay veces que se me sube la sangre al campanario.., y a nadie parece preocuparle. Y encima luego viene el ministro de turno diciendo que te pueden dar una patada en la puerta porque estas supuestamente cometiendo una falta administrativa (no es delito, las reuniones estas, inmorales, estúpidas e infantiles, pero faltas, no delitos), ¿imaginas que esto mismo, lo mismo, lo hubiese hecho uno del PP?. Pues eso, que nos guiamos como rebaños aunque de miles de muertos hablamos.
Yo tenia una comida preparada en mi casa para 7 personas para hoy, la he anulado y la verdad, después de lo que vi ayer en los supermercados, pues no se que decirte, anulada esta, pero me jode.
ESo por no hablar de 30.000 dosis de vacunas que han desaparecido, que manda huevos que diría el otro, ¿como se pueden perder 30.000 dosis de un producto que está congelado y con transporte especial?, pues bien, yo te lo digo, esas dosis están siendo puestas a gente que las paga, asi de sencillo, y aquí no pasa nada.
Un saludo.
es que en el fondo, el problema y la solución no está en las medidas que más o menos acertadamente pueda decretar el Gobierno. La solución está en el comportamiento de la gente, así de sencillo y luego entra en juego el sentido común, para andar por la calle no hace falta la mascarilla, de hecho sólo la llevamos en España e Italia, ahora, a la que entras en cualquier sitio cerrado, luego si hay que ponérsela.
EliminaComplemento lo de las dosis, todos los camiones ahora tienen aparatos que saben donde han estado y a que hora, asi de sencillo. Eso se llama trazabilidad, aparte cuando un camión coge una carga tiene obligación de llevar un documento con la carga que lleva y hacer documento cuando la deja.
ResponEliminaSe puede seguir la trazabilidad de un producto hasta su origen, una chuleta se puede rastrear hasta la vaca, un pieza de automóvil hasta la cadena de montaje , el origen y los operarios y estos pierden vacunas.
¿Como se pueden perder 30.000 vacunas?
No sigo que me caliento.
Un saludo.
Vamos a ver, 30 mil vacunas, aparte de ser el chocolate del loro, la noticia viene de Vozpopuli, o sea del dudoso periodismo amarillo, habría que contrastar esta noticia, además, como cuando pillan a alguno con marihuana, el Gobierno siempre puede aducir que es para uso propio.
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