A voltes amb la llibertat d'expressió, hi ha el problema d'on posar la línia vermella que traspassa aquesta llibertat per ser directament un insult, i no nomès a la inteligencia. Llegiu aquest escrit d'en Salvador Sostres a l'ABC d'ahir dilluns.  Em temo que ha traspassat totes les línies vermelles, però és la seva opinió i s'ha de respectar que no acceptar, ni compartir....

Sexo débil, sexo fuerte
Publicado por Salvador Sostres el mar 6, 2017

Las mujeres son el sexo débil y por eso existe el tenis femenino; y el hombre es el sexo fuerte y por eso se considera una violencia específicamente castigable que un marido pegue a su esposa. En casa éramos muy de Steffi Graf y si no me hablo con mi padre es por algo.

Las niñas tienen vulva y los niños tienen pene, y luego ayudaremos a los transexuales como a cualquiera que tenga un problema, pero ni el género es una construcción social ni se pueden negar las diferentes características de machos y hembras. Mi mujer no tiene mi fuerza ni yo su mala leche.

Las niñas son de azúcar y los niños de hierro, decía siempre mi magnífica tía Lola, y tenía toda la razón aunque seguramente hoy la meterían en la cárcel.
Por eso los hombres cedemos el paso a las damas, pagamos las cuentas de los restaurantes y aceptamos los consejos de la inteligencia superior de nuestras esposas justo cuando estamos a punto de perdernos.

Por eso las mujeres han aprendido a suplir con astucia su fragilidad y a utilizar nuestra fuerza en su favor. Por eso saben mejor que nosotros conseguir lo que se proponen y por eso nos piden que les llevemos las maletas, aunque sin que nos lo pidan también lo hacemos.

El feminismo no defiende a las mujeres sino el cuantioso negocio del feminismo, basado en el resentimiento y en querer igualar a las mujeres con los hombres cuando no está en nuestra naturaleza ser iguales ni querer serlo.

Es cínico denunciar que los hombres abusan de su fuerza física y negar luego esta fortaleza. Es absurdo legislar para proteger la debilidad de las mujeres y luego tratarla de borrar del diccionario. El feminismo busca bronca para cobrar como el que viene a solucionarla y no hay nada tan humillante para una mujer preparada como las cuotas y la negación de la realidad para el simulacro de hacerle sentir lo que no es ni quiere ser.

A mi hija le compro disfraces de princesa y con mi ahijado vamos a comer ostras como unos bestias. Y somos todos muy de derechas, sí. Y estamos muy contentos y nos va muy bien.